18 may 2015

Mr. Turner: Pinceladas de simpleza y buen gusto

* * * *  MUY BUENA

El aclamado director inglés Mike Leigh, responsable de obras como “Secretos y Mentiras” (1996), “Topsy-Turvy” (1999) y “El Secreto de Vera Drake” (2004), se adentra en la vida y obra del polémico y reconocido pintor impresionista Joseph Mallord William Turner (1775-1851). El siete veces nominado al premio Oscar hace gala de toda su pericia y la traslada cuidadosamente a la pantalla grande a través de un modo visualmente atractivo. Empleando recursos cinematográficos que subrayan los aspectos artísticos para realzar las actuaciones y la trama, logran que el espectador se involucre no solamente con el arte creado por Turner sino con su persona.

Presentada en el Festival de Cannes en el 2014, lo que le permitió a su protagonista Timothy Spall alzarse con el premio a Mejor Actor y a Leigh optar por la Palma de Oro, la película nos pone a nuestro alcance algunos aspectos de la vida del pintor. No se centra en los traumas personales o familiares del artista (algo que suele suceder a menudo en los biopic), sino en su cotidianeidad, en su vida diaria, y cómo ésta repercute en su comportamiento y en su arte: su relación con su padre, su ama de llaves, sus hijas y la mujer con la que compartió sus últimos años; su quehacer académico; sus viajes para encontrar inspiración; su vinculación con la realeza y los estratos sociales más bajos; y su intervención dispar en la Real Academia de Artes.
No es de menor importancia que la cinta transcurra en esa dirección, sin escenas de alto impacto dramático y/o emocional y sin apelar a los trastornos existenciales que se plantean en las mentes de los grandes artistas. Quizás el mayor logro del director haya sido la forma de contar la historia de Turner, vinculándola a la simpleza de la vida. Y aquí está la riqueza de la trama pues que atraiga y capte la atención desde lo sencillo es algo de remarcar.
El trabajo de Timothy Spall (los más jóvenes siempre lo recordaremos como Peter Pettigrew o "Colagusano" en la saga de "Harry Potter") es más que sobresaliente. Había una expresividad en su rostro y en su voz que sorprendía demostrando, de esta manera, que es uno de los mejores actores británicos de su generación. Tranquilamente hubiese podido acceder a una nominación al Oscar por su interpretación.
Desde lo estético, no hay nada para cuestionar sino que, por el contrario, es de alabar en toda su amplitud. No por nada sus cuatro nominaciones al premio Oscar fueron en las categorías artísticas (Mejor Diseño de Producción, Mejor Banda Sonora, Mejor Fotografía y Mejor Vestuario). Hay que destacar un aspecto de esta cinta y es el intenso trabajo de fotografía desarrollado por Dick Pope (por el cual fue premiado en Cannes) goza de una destreza tal que parece sumergirnos en una de las obras del paisajista inglés. Es de una belleza tan sutil como potente y solo quien haya visto esta cinta sabrá interpretar mis palabras. Es una experiencia de la que nadie puede privarse.
Recomendable de principio a fin, es una cinta que se degusta con sumo placer. No hay manera de no caer rendido ante este espectáculo visual e interpretativo.

Crítica realizada por Leo Arce.


No hay comentarios.:

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...