* * REGULAR
"47 meters down" es otra película con temática de tiburones que se suma a la ya abultada videoteca de propuestas fallidas. Es difícil, lo sé. Lo que logró "Tiburón" fue un caso en mil, en una época muy propicia para su éxito y con un director de otro planeta como lo es Steven Spielberg. Quizás esto debería encender las alarmas en los estudios de cine y directores cuando los vienen a convencer de hacer películas con temática de tiburones de presupuesto bajo o moderado, pero cada un par de años salen nuevas propuestas que terminan siendo un fracaso. En este caso, la cuestión es un poco engañosa incluso, pero digamos que en el buen sentido.
Durante su promoción se deslizó la idea de que la trama estaba centrada en los tiburones y cómo estos le harían la vida imposible a las protagonistas, pero la verdad es que la historia pasa por otro lado. Esto de cierta manera es bueno porque no nos quisieron vender tiburones asesinos como en los últimas propuestas mediocres que hemos visto, aunque la trama principal de las dos hermanas atrapadas en el fondo del mar tampoco llega a convencer del todo y la película se hunde sola.
Para empezar, la forma en que caen al fondo del mar es bastante torpe y poco probable. Ya desde acá, que es el inicio, se huele un guión con poco con qué trabajar. Luego empieza la odisea de nuestras protagonistas y se viven los momentos de mayor tensión en una carrera contra el tiempo, la falta de oxígeno y la amenaza de ser comidas por tiburones blancos. A veces logra su cometido, pero en el balance general no alcanza la contundencia que debería y se termina haciendo monótona hasta que llega el desenlace final. Debo decir que la idea inicial de desenlace no era mala, pero se anticipa tanto y se sobreexplica que se vuelve totalmente predecible y pierde fuerza.
Si bien creo que tenía buenas intenciones y por momentos casi logra convertirse en un buen entretenmiento, el resultado final se queda por debajo de los 6 puntos de 10, y por eso debo colcarla en la repisa de películas fallidas de tiburones.
Durante su promoción se deslizó la idea de que la trama estaba centrada en los tiburones y cómo estos le harían la vida imposible a las protagonistas, pero la verdad es que la historia pasa por otro lado. Esto de cierta manera es bueno porque no nos quisieron vender tiburones asesinos como en los últimas propuestas mediocres que hemos visto, aunque la trama principal de las dos hermanas atrapadas en el fondo del mar tampoco llega a convencer del todo y la película se hunde sola.
Para empezar, la forma en que caen al fondo del mar es bastante torpe y poco probable. Ya desde acá, que es el inicio, se huele un guión con poco con qué trabajar. Luego empieza la odisea de nuestras protagonistas y se viven los momentos de mayor tensión en una carrera contra el tiempo, la falta de oxígeno y la amenaza de ser comidas por tiburones blancos. A veces logra su cometido, pero en el balance general no alcanza la contundencia que debería y se termina haciendo monótona hasta que llega el desenlace final. Debo decir que la idea inicial de desenlace no era mala, pero se anticipa tanto y se sobreexplica que se vuelve totalmente predecible y pierde fuerza.
Si bien creo que tenía buenas intenciones y por momentos casi logra convertirse en un buen entretenmiento, el resultado final se queda por debajo de los 6 puntos de 10, y por eso debo colcarla en la repisa de películas fallidas de tiburones.
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