* * * BUENA
"The Hitman's Bodyguard'' o ''Duro de Cuidar'' (me destruyen las traducciones tan poco hueveras que hacen para el mercado latino) es una comedia de acción entretenida, una buddy movie que sin muchas aspiraciones logra su cometido y ofrece 2 horas de un mix de risas y escenas de acción que olvidaremos a los pocos días de haber ido al cine. Ojo, no es mala película en general, pero su premisa de entrada no se toma demasiado en serio y no llega a impactar en el largo plazo para los espectadores. Es un típico caso de desconectar cables cerebrales, entregarse al entretenimiento y volver a conectar a la salida.
En esta propuesta Michael Bryce, el personaje de Ryan Reynolds (''Deadpool''), es un reconocido y talentoso guardaespaldas que en uno de sus trabajos se ve forzado a cuidar a un despiadado asesino a sueldo con el que tiene una historia de enfrentamientos de larga data. Este sicario llamado Darius Kincaid, en la piel de Samuel L. Jackson (''Pulp Fiction''), es un testigo clave en una causa que involucra al dictador Vladislav Dukhovich, interpretado por otro peso pesado de Hollywood, Gary Oldman (''Darkest Hour''). La misión de Bryce es mantener con vida, y en su custodia, a Kincaid hasta que pueda declarar en el juicio contra Dukhovich. Es en el camino hacia ese juicio en lo que se enfoca esta comedia de acción, que baila entre el humor de su dúo protagonista y escenas de acción bastante bien producidas. Tanto Ryan como Samuel han demostrado ser dos tipos muy talentosos y versátiles en la gran pantalla, son de esos tipos que son creíbles como comediantes y a la vez como héroes de acción. Y estos dos géneros son el fuerte de la propuesta. El humor negro es inteligente y saca un par de sonrisas malévolas a los espectadores. La acción por su parte, es cruda y fuerte como deben ser los films de acción.
Las actuaciones están un poco exageradas y caricaturescas, pero como todo el cast es muy capaz en ese rubro, no se notan tanto lo momentos más brutos.
Y por último el guión... bueno, es lo más débil de la película, no porque esté mal escrito, sino porque tiene relevancia cero y es de hecho bastante clicheroso. Esto la convierte en un propuesta cinematográfica de 3 estrellitas y no 5.
Leí por ahí que se viene la secuela... ¿EN SERIO? ¿ES NECESARIO?
En esta propuesta Michael Bryce, el personaje de Ryan Reynolds (''Deadpool''), es un reconocido y talentoso guardaespaldas que en uno de sus trabajos se ve forzado a cuidar a un despiadado asesino a sueldo con el que tiene una historia de enfrentamientos de larga data. Este sicario llamado Darius Kincaid, en la piel de Samuel L. Jackson (''Pulp Fiction''), es un testigo clave en una causa que involucra al dictador Vladislav Dukhovich, interpretado por otro peso pesado de Hollywood, Gary Oldman (''Darkest Hour''). La misión de Bryce es mantener con vida, y en su custodia, a Kincaid hasta que pueda declarar en el juicio contra Dukhovich. Es en el camino hacia ese juicio en lo que se enfoca esta comedia de acción, que baila entre el humor de su dúo protagonista y escenas de acción bastante bien producidas. Tanto Ryan como Samuel han demostrado ser dos tipos muy talentosos y versátiles en la gran pantalla, son de esos tipos que son creíbles como comediantes y a la vez como héroes de acción. Y estos dos géneros son el fuerte de la propuesta. El humor negro es inteligente y saca un par de sonrisas malévolas a los espectadores. La acción por su parte, es cruda y fuerte como deben ser los films de acción.
Las actuaciones están un poco exageradas y caricaturescas, pero como todo el cast es muy capaz en ese rubro, no se notan tanto lo momentos más brutos.
Y por último el guión... bueno, es lo más débil de la película, no porque esté mal escrito, sino porque tiene relevancia cero y es de hecho bastante clicheroso. Esto la convierte en un propuesta cinematográfica de 3 estrellitas y no 5.
Leí por ahí que se viene la secuela... ¿EN SERIO? ¿ES NECESARIO?
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