16 jun 2016

Buenos vecinos 2: Nuevo choque adultez vs. adolescencia

* * *     BUENA

Vuelve el matrimonio Radner a la gran pantalla y esta vez se deben enfrentar a otra ruidosa fraternidad pero llena de chicas anárquicas en busca de igualdad de derechos y fiestas alocadas. ¿Suena raro no? Bueno, seamos sinceros, la lógica es de los aspectos menos importantes de esta propuesta de humor de la nueva comedia americana. El que vio "Buenos Vecinos" sabe que lo realmente atractivo del film fueron los momentos de comedia física y algunos diálogos locos, y no la inteligencia de su guión. En esta ocasión se repite la fórmula de la entrega original y se le agregan algunos toquecitos distintos como para que no suceda lo mismo que con "¿Qué pasó ayer? 2" que era prácticamente lo mismo que la primera película. 
Mac (Seth Rogen) y Kelly (Rose Byrne) están a punto de vender su casa cuando inesperadamente un grupo de chicas se muda a la casa de al lado y comienzan su peor pesadilla, una nueva fraternidad pero llena de mujeres con más ganas de drogarse y enfiestarse que los chicos de la primera entrega. La vuelta de tuerca está en que estas chicas no encajan en el perfil de fiestas de fraternidades, sino que quieren fundar un nuevo movimiento con fiestas adaptadas para chicas, donde no sean objeto sexual de los chicos. Sí, ya se, no es de lo más inteligente que se les pudo ocurrir, pero al menos da un marco un poco más actual y menos estereotipado de las fraternidades.
La dinámica es bastante parecida a su antecesora y por eso le bajo un punto completo. Si bien los momentos de humor físico y algunos diálogos son muy divertidos, no hay nada significativamente nuevo. Incluso vuelven a usar las escenas de los airbags pero no incluyeron ningún hito nuevo al estilo de ese. El otro punto es porque una comedia de este estilo nunca puede llegar a ser excelente. Si bien nos reímos y divertimos con la idiotez de sus protagonistas, la personalidad que se les imprime es realmente boba, superficial y no aporta nada al cine, lo que no quiere decir que no haga reír, pero es sencillamente un subgénero de calidad inferior.
Rogen y Byrne siguen cumpliendo muy bien, con química y diálogos que hacen sentir identificados a los espectadores arriba de treinta, casados y con hijos. Zac Efron de a poco se va consolidando en el género de la comedia y Cloe Grace Moretz se suma con un rol que no terminó de convencerme demasiado.
Un peli para los que disfrutaron la primera entrega y quieren divertirse un rato sin muchas pretensiones.



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